● Hogar de misterios ●


✦ 01 ✦

Upper West Side (UWS) ● Manhattan ● New York City ● New Home

Yo lo que quiero es perderme. Bajar a todos los subterráneos, subir a todas las cúpulas, andar todos los metros.No hay otro lugar en el mundo donde desearía estar. Estoy amando cada instante de esta ciudad.I belong here, lo sé. Lo puedo sentir en mis huesos.¡Y qué casa!¡Qué habitación!Necesito un capítulo aparte para hablar de mi nuevo dormitorio…Papá alquiló la casa más estrafalaria que pudo encontrar en el Upper West Side de Manhattan.Una mezcla de mansión con casa embrujada. Literal. Tiene torres que acaban en punta con pequeñas ventanas y chimeneas.Está dividida por dentro y tiene entradas independientes. Creo que al menos otras dos familias habitan aquí. Tengo que confirmarlo.Pero prometí que desempacaría primero, y no quiero más discusiones.Mamá no está para nada contenta con que yo empiece a ir al colegio público aquí, después de mil años siendo educada en casa. Y no lo disimula. Tengo que tener todo en orden para cuando vuelva del trabajo. No quiero dar motivos para nuevas peleas.Por ahora.● ● ●


✦ 02 ✦

UWS ● Home ● Mi nueva habitación

Mi habitación es simplemente increíble.Nunca había tenido una tan grande ni al estilo buhardilla, en el último piso de la casa.Tengo dos ventanas como de castillo desde donde alcanzo a divisar el río Hudson, donde me escapo a remar por las mañanas.Pero lo mejor de todo es la puertita secreta, disimulada entre los paneles de madera. Al principio, pensé que era solo un armario, pero resulta que conduce a un espacio amplio y sin ventanas que se ha convertido en mi santuario personal.Ahí tengo mis tableros de evidencias, con fotos y recortes, y todo tipo de información de cosas raras, que no hacen sentido, que les falta una pieza y que mi cabeza no permite olvidar.Y la ficha médica de la que nadie me quiere hablar.La habitación, con su techo inclinado y sus rincones acogedores, tiene un suelo de madera que cruje suavemente bajo mis pies.En una esquina, hay una antigua chimenea, aunque no estoy segura de si aún funciona. Imagino noches frías de invierno con un fuego crepitante y mucha lectura.He colgado unas luces alrededor de la ventana.En las paredes hay estantes con libros polvorientos a los que ahora agrego los de mi propia colección.Una vieja lámpara de pie, con su pantalla de tela desgastada, arroja una luz cálida y tenue que ilumina cada rincón.Like damn, cómo esto podría ser mejor?● ● ●


✦ 03 ✦

UWS ● The New House

—¿Tú qué piensas? —pregunté—. De la nueva casa.—No sé por qué nunca podemos vivir en lugares normales —me dijo Aldonza, mi hermana, sentada sobre mi cama con los dedos perdidos en su iPhone—. Esta tiene toda la pinta de estar embrujada.—Eso es lo increíble —exclamé, sonriendo—. ¿No te parece fascinante que un lugar como este exista? Con las paredes de piedra cubiertas de musgo en el exterior, y las grandes estanterías llenas de libros antiguos, y esos artefactos en las salas que hacen ver todas las habitaciones como una máquina del tiempo esperando a mostrarnos millones y millones de secretos.—El único secreto que me importa por ahora es descubrir la clave de wifi.Salimos juntas al pasillo, pasando por puertas que conducían a rincones y pasajes oscuros.Tapices antiguos colgaban de las paredes, muebles ornamentados ocupaban las habitaciones, alfombras con toques elegantes y gigantescas lámparas colgando de altísimos techos.En el área común, nos encontramos con papá todavía intentando conectar el router a la red eléctrica.Nos miramos cómplices: papá es perfecto para analizar el trayecto de las estrellas, pero completamente inútil para conectar cables a tierra.Aldo y yo nos enrollamos las mangas.● ● ●


✦ 04 ✦

UWS ● Home ● Una perturbante llamada

It was weird.Dentro del caos de limpieza y organización en el que estábamos metidos con mi familia, nos vimos interrumpidos por el estridente timbre del teléfono.Yo, siendo la que estaba más cerca, fui quien contestó. Nadie detuvo su tarea para prestarme atención.Era la secretaria de la oficina corredora de bienes raíces, y no era a papá a quien buscaba.—Sí —respondí cuando mencionó el nombre de mamá, e informó que su abogado (ABOGADO!) ya había entregado toda la documentación para el cierre del acuerdo. El contrato de alquiler ya estaba disponible para ser firmado por mi madre y la contraparte, Goth Trust Fund."Gracias por avisarme", dije al escucharla terminar, tratando de mantener la compostura.Holy shit.Mi cabeza iba a mil por hora recordando cada conversación de los últimos meses en Amsterdam antes de partir.¿No era que habíamos obtenido este leasing por el trabajo de papá en la Universidad? ¿Que se había escogido esta ubicación entre la Universidad de Columbia donde papá hacía investigación, y el Planetario del Museo de Historia donde estaba colaborando? ¿Acaso no habían dicho que todo este sector de casas estaba destinado a los profesores?¿Qué tenía que ver mi madre, reportera del New York Times... y su abogado... y una sociedad, con el alquiler de esta casa?El corazón comenzó a latirme desbocado. ¿Acaso estaban pensando divorciarse?● ● ●


✦ 05 ✦

UWS ● Home ● En el ático

—¡Pascu, a cenar!Fue cuando estaba sumergida entre los papeles amarillentos y polvorientos de una habitación sellada con un candado estropeado, que me encontré empujando un conjunto de grandes rollos de papel a mi costado.Levantaron una diminuta nube de polvo antes de dejarse ver en variedad y cantidad.Algunos rollos eran gruesos, otros delgados, y algunos tubos estaban hechos de cartón.Les eché una mirada rápida a la mayoría, sin abrirlos, aunque eso era lo que más deseaba hacer, pero la voz de mamá me retumbaba en los oídos y solo pensaba en que tenía que bajar lo más pronto posible para evitar nuevos conflictos..., pero uno de los rollos en el suelo captó mi atención.Estaba envuelto en algo parecido al terciopelo y anudado con cintas de seda doradas.No estaba buscando hacerla enojar, pero un descubrimiento como este no se hacía todos los días.Muy cuidadosa, deslicé los dedos por las orillas del papel dentro de la tela, tratando de sacarlo sin que se deshiciera en pedazos.No quería que el polvo arruinara su contenido, especialmente cuando parecía que la última persona que lo había visto se había esforzado tanto por protegerlo, así que solo pensé en extenderlo sobre mis piernas.Era un plano. Un plano de esta casa.La iluminación de mi linterna me ayudó a revisar las líneas trazadas con tinta negra; me detuve en habitaciones, pasillos y subterráneos, pero-Algo no tenía sentido.Podía reconocer gran parte de las habitaciones dibujadas en el plano, pero varias otras, no.Ya he caminado por ahí, estoy segura, y no he visto nada más que paredes y pasillos sin salida.Además sobre cada una de esas supuestas habitaciones secretas del mapa, se dibujaba un símbolo arcaico.—¿Pascu, tengo que subir a buscarte?Shit, shit, shit, shit, shit...—Coming!Devolví el antiguo plano de la casa a su tela y me lo acomodé bajo el brazo.Durante la cena, mientras mis hermanos hablaban sobre las grandes ventanas aún cubiertas por periódicos y cómo íbamos a limpiar los enormes candelabros colgando del techo, yo no podía pensar en nada más que en los planos que esperaban por mí en mi dormitorio, y en esos extraños símbolos.Pero... ¿es mi imaginación o mamá quitó la mano cuando papá se la quiso acariciar?● ● ●


✦ 06 ✦

UWS ● En mi habitación ● In the small hours of the night

Me dormí pasadas las tres de la madrugada.Estoy segura que esas habitaciones no existen.He recorrido los tres pisos de la casa una cantidad absurda de veces, y aunque no siempre presté atención a todo, sé que hubiera notado la presencia de otras habitaciones.Volví a extender los planos de la casa sobre mi cama, y a fijarme en particular en los símbolos dibujados sobre esas misteriosas habitacionesRecurrí a mis libros de símbolos y grafología.Me dediqué a comparar las formas extrañas durante horas hasta que, por fin, después de muchos capítulos de la historia, los dibujos del plano comenzaron a calzar con los símbolos alquímicos descritos en uno de los capítulos, ese que hablaba sobre el siglo XVII. Los comparé uno a uno, tomando en cuenta cada símbolo sobre los planos.Eran varios, pero uno en particular resaltaba por su trazo ligeramente más grueso. Si fue hecho así a propósito o no, tenía que averiguarlo.This is messing with my head.—Pascu.Aldonza casi me hizo explotar el corazón.—¿Qué haces despierta? —le susurré.—¿Qué haces tú despierta?Aldo entró a mi dormitorio y cerró la puerta tras ella. Traía la chaqueta abotonada y ligeramente teñida por un polvillo blanco.—¿Qué tal las donuts? —le pregunté.—Agh, no me juzgues, necesitaba un poco de luces de neón y gente normal hablando cosas normales.—¿Y supongo que el chico de pelo desordenado y mirada rebelde que trabaja el turno de la noche en el Dunkin' Donuts es parte de tu necesidad de normalidad?—¡Ya lo viste! ¿Cuándo? ¿Verdad que es guapo? ¿Te gustó? Si tú lo viste primero y te gustó–—Cállate. No. No me gusta..., aunque ese look de chico malo...—Awwwww.—I'm just messing with you! Pero si vas a escaparte en la mitad de la noche no olvides el gas pimienta que te regalé. ¿O no sabías que el índice de crímenes en esta área ha aumentado en un 20% en los últimos cinco años? Sin mencionar el número alarmante de desapariciones sin resolver.Aldo rodó los ojos, enfocándose en los símbolos otra vez.—¿Esto es lo que estabas viendo el otro día?Asentí. —¿Ves esto de aquí? Es el segundo piso, detrás de las escaleras.—No hay nada detrás de las escaleras.Ella me miró, como esperando que lo confirmara.—Aparentemente, sí lo hay. Iré a investigar. ¿Vienes?(Y ahí sucedió lo peor)De camino al segundo piso, haciendo la menor cantidad de ruido y con las linternas de nuestros celulares iluminando nuestro camino, Aldo volvió a hablar.—¿Qué pasa con papá y mamá? —me preguntó.—¿Tú también lo notaste?Bajamos por las escaleras mirando el resto de la casa en la oscuridad. A esas horas todo siempre luce diferente. En especial cuando las paredes seguían descascaradas y las arañas de cristal aún no las limpiábamos.—Creo que es aquí —murmuré, viendo la fotografía que tomé del plano antes de devolverlo bajo mi cama.Comencé a abrir la puerta escondida sin ninguna resistencia cuando un repentino quejido nos hizo tensar.La sorpresa se transformó en pánico cuando el ruido se unió a un suave repiqueteo en el piso superior, justo sobre nosotras. La habitación de papá y mamá.Nos miramos, el reconocimiento reflejado en nuestros ojos tamaño ovni. AGH!Sin decir una palabra, salimos de ahí tan rápido como pudimos, nuestros pasos resonando en el pasillo silencioso. Ni siquiera nos dimos las buenas noches.Lo peor que nos podía pasar en la vida nos sucedió: We heard our parents having sex."Hopefully make up sex", pensé yo. Quizá no habrá divorcio.● ● ●


✦ 07 ✦

UWS ● Home ● En búsqueda de la habitación secreta ● Segundo Intento

Lo hicimos más temprano, después de asegurarnos que papá y mamá estuvieran en la gala del Met. Evento al que (gracias al Dios) por esta vez me salvé de ir.La habitación era mucho más pequeña que la mayoría a primera vista.Removí las cajas y los baúles acumulados del camino, revisando en busca de cualquier señal.Apunté con la linterna por las paredes, escuchando a Aldo moviendo más cosas del suelo; apartando sillas, ropa y provocando ruidos de cristales chocando entre sí.Dijo algo sobre botellas y frascos vacíos, pero yo me quedé observando lo que estaba frente a mí.En medio de la pared, un par de puertas selladas con una cerradura tipo puzzle deslizable.—No me lo creo —exclamó Aldo—. ¿Qué es eso?—Es un candado.Un rompecabezas cuadrado de ocho piezas y un espacio vacío. Lo toqué con dedos apurados, sin buscar nada más que sentir el material. Cerré los ojos y vi de inmediato la imagen que debía formar.Con la imagen en mi cabeza, comencé a mover los cuadritos metálicos labrados una y otra vez, deslizándolos por diferentes rincones dentro del cuadrado, hasta al fin formar el símbolo alquímico que se dibujaba en el plano.Las puertas entonces se abrieron por cuenta propia.Al otro lado, una pequeña estantería repleta de frascos de cristal con líquidos, y un pequeño cuaderno de notas.—Elixir de la vida —leí en voz alta, con una sonrisa.Aldonza se acercó más para ver.—O Aqua Vitae como también es conocida. Es una sustancia que se decía posee propiedades curativas y rejuvenecedoras —continué—. Prolonga la vida y otorga inmortalidad.—Ya. Es decir a bunch of shit.—Pero a bunch of shit por el que la gente ha estado dispuesta a pagar fortunas. El Agua de Vida era común en la antigua alquimia. Pero más allá de eso, fue un elixir muy popular en las sectas espirituales de los años 50. Se dice que muchas celebridades de la época las frecuentaban, y bebían estos brebajes para luego fingir sus muertes y desaparecer. Hay muchas sociedades secretas de ese estilo.Miré los frascos detenidamente y noté algo inquietante: algunos tenían nombres de personas. Un escalofrío de emoción y tensión me subió por la espalda al comenzar a hacer algunas conexiones.—¿Estás diciendo que quizá podría haber dinero aquí escondido?—inquirió Aldonza.—Mhm, te aseguro que en alguna parte, sino en ese mismo cuaderno, debe haber un registro de las sumas pagadas por esas celebridades.—Esto acaba de volverse increíblemente interesante para mí —murmuró Aldo, y su pelo rojo pareció encenderse aún más.● ● ●


✦ 08 ✦

UWS ● En mi habitación ● Con Aldo

Con Aldo hemos estado hablando del descubrimiento que hicimos la noche pasada desde que despertamos.Bueno, casi.Aldo se quedó dormida sobre mi cama y yo me escabullí a remar una hora.Cuando regresé me la encontré desperezándose entre las sábanas y con la mirada revoloteando sobre mis libros en la mesilla de noche.Shit, olvidé guardarlos...—Uuuuh, ¿de qué se trata todo esto? —preguntó Aldo en tono burlón.—Déjalo, no son novelas para chicas de tu edad —dije apartándolos de la mesa y disimulando mi incomodidad.—¿Spicy?—Aldo, no quiero hablar de eso. Y... ¿qué sabes tú de eso?—Lo sé todo.No pude evitar que se me formara una sonrisa en la cara. —Sí, por supuesto.—Okay, escucha. Cuando saliste a remar, volví a esa habitación. Les tomé una fotografía a todos los frascos y volví a sellar las puertas.Revisé los registros que me mostraba mientras la escuchaba hablar.—¿Solo quince tenían nombres?—No todos tienen nombres. Algunos parecen ser solo iniciales. Puede que sean los nombr-De repente, la puerta se abrió de golpe y Ludvik y Rosamund irrumpieron en el cuarto, llevando puestas unas viejas máscaras de teatro mientras gritaban con el afán de aterrorizarnos.—HEY!—Little pieces of shit!Los dos se quitaron las máscaras, riendo a carcajadas, pero antes de que pudiéramos reaccionar salieron corriendo por el pasillo. Nos levantamos de un salto y salimos tras ellos.—¡Vuelvan aquí! —grité mientras los perseguíamos.Antes de poder seguirlos, un baúl a medio camino me lo impidió, descubierto y revelando un desorden de viejas máscaras e indumentaria de teatro.—¿Qué pasa con esas horribles máscaras? —murmuró Aldonza, devolviéndose de haber perseguido a los otros dos para acercarse a mí.Dentro del baúl, además de las máscaras y trajes de teatro que no me dieron nada de información, encontré un diario de cuero y algunos folletos antiguos de obras de teatro. El diario era la pieza más prometedora, y la primera página tenía una fecha de hace varias décadas, además de una inscripción: "Propiedad de O. S."—Aldo, vuelve a leerme la lista de los frascos que tienen nombres.Una de las botellas con el Elixir de la Vida traía una etiqueta: "Olivia Sinclair".O.S.● ● ●


✦ 09 ✦

UWS ● Home ● Investigando

Olivia Sinclair fue una actriz de teatro que vivió en Mahattan durante los años sesenta. Las entradas de su diario detallaban su vida en el teatro, los días de ensayos y los diferentes roles que interpretó a lo largo de su juventud.Lo que más destacaba en el diario, sin embargo, fue una serie de entradas sobre una obra llamada "La Máscara de la Tragedia," que, según Olivia, nunca se había presentado debido a circunstancias misteriosas.Todo de lo que escribió de aquella obra, fueron las últimas escrituras en su diario.Según Olivia, se trató de una obra escrita por un dramaturgo famoso que había desaparecido poco antes del estreno.Describía cómo los miembros del elenco comenzaron a experimentar sucesos extraños y cómo los rumores sobre una supuesta maldición se extendieron en apenas un par de días. Finalmente, la obra fue cancelada y el dramaturgo nunca fue encontrado.En una de sus últimas anotaciones, Olivia relataba una reunión en el teatro donde el elenco discutió la creciente tensión y los sucesos extraños que habían estado ocurriendo. Se mencionaban luces que parpadeaban sin razón, susurros en los pasillos vacíos y la sensación de ser observados desde las sombras. "La Máscara de la Tragedia" parecía tener un efecto inquietante en todos los involucrados, y Olivia no era la excepción.No escribió más después de eso.Todo eso me sonaba a demasiada fantasía. Histéricos de diva, quizá.Decidida a confirmar la veracidad de la historia, me dirigí a mi MacBook y busqué información sobre Olivia Sinclair en Internet. Todo lo que encontré fueron fotos en blanco y negro, sin detalles que respaldaran las afirmaciones del diario. Pero la mujer era guapa. Glamorosa.A pesar de encontrar diferentes noticias y artículos de diferentes obras, seguía sin encontrar la que Olivia mencionaba. Casi parecía que alguien lo hubiera evitado escribir, o lo hubiera eliminado.Insatisfecha, por la tarde decidí ir a la biblioteca local. Entre antiguos periódicos del New York Times, finalmente encontré lo que buscaba: una noticia sobre la clausura del teatro, la obra que nunca se estrenó, y el nombre del periodista que escribió la noticia: Jonathan Harris."El Teatro del Edén cierra sus puertas tras una serie de eventos inexplicables durante los ensayos de 'La Máscara de la Tragedia'. El dramaturgo, Raymond Collins, sigue desaparecido. Los rumores de una maldición continúan circulando."Leí la noticia en voz alta, con los ojos abiertos de par en par.HOLY SHIT IT WAS TRUE.● ● ●


✦ 10 ✦

Midtown ● Rumbo al Highline ● Intercambio de correos

"Estimada Pascualina,Me sorprende saber que has encontrado el diario de Olivia. Hace mucho que no oigo su nombre y recordar aquellos tiempos siempre me deja con gran sentimiento. Por desgracia no me encuentro en NYC en estos momentos, pero no dudes en hacer todas tus consultas por este mismo medio. Estaría encantado de hablar contigo y contarte lo que recuerdo de 'La Máscara de la Tragedia' y de Raymond Collins.Cordialmente, Jonathan Harris."● ● ●


✦ 11 ✦

UWS ● Home ● Intercambio de correos

Con Jonathan Harris intercambiamos algunos cuantos correos a lo largo de la semana. La incredulidad me superaba con cada foto, artículo y recorte de prensa que me enviaba. Cada vez que cerraba los ojos, me imaginaba las luces parpadeando, las puertas cerrándose de golpe, y la sombra de un hombre acechando por los pasillos del teatro. Era como si pudiera sentir la presencia de esos fantasmas del pasado, susurrándome al oído.La figura de Raymond, en las descripciones de Jonathan, se perfilaba como un genio atormentado. Harris mencionaba que era su primera obra y que su ambición desmedida había arruinado la experiencia para todos. ¿Qué clase de obsesión podía consumir a alguien hasta ese punto?Tal vez sí existía una razón por la que el baúl, con el diario y la indumentaria de teatro, fue olvidado en mi casa. ¿Quizá, con dejarlo todo abandonado en el fondo de ese pasillo, realmente creían que escapaban de una maldición?No puedo seguir sola en esto. Tengo que hablar con Aldonza. Las luces del tercer piso siguen descompuestas, a pesar de las veces que papá cambió las bombillas, y ahora, en serio, estaba comenzando a cuestionarme la razón.Más detalles de la historia de Olivia Sinclair o Raymond Collins podría estar oculta en estas paredes, y entre tantas habitaciones secretas, estaba segura que al menos alguna podría darme una respuesta más.Tengo que ir por ese plano bajo mi cama.● ● ●


✦ 12 ✦

UWS ● Home ● Investigando el tercer piso

Aldonza llegó a mi dormitorio con una bolsa llena de equipos y, para mi sorpresa, vestida como una verdadera caza fantasmas. Llevaba un mono negro ajustado, botas militares y un cinturón lleno de herramientas que solo había visto en programas de televisión. Le sonreí mientras nos dirigíamos a las escaleras.—¿En serio? —le pregunté.—Si vamos a cazar fantasmas, tenemos que hacerlo bien —respondió, subiendo conmigo al tercer piso.La madera crujía con cada paso.—¿Tenemos alguna pista con cómo comenzar la búsqueda? —preguntó Aldonza—. Porque, digo, hay muchos supuestos cuartos ocultos en el plano.—Por ahora, creo que de encontrar algo relacionado a Olivia o la desaparición de Raymond, lo encontraríamos en el mismo piso donde Ludvik encontró ese viejo baúl.—Claro. Además, es el mismo piso con las luces que actúan raro —Aldo me miró y fingió un tono tenebroso, reprimiendo una risilla—. Dijiste que así empezaron las primeras señales de la maldición en el teatro, ¿no?—Coincidencia —dije.—Seguro —exclamó Aldonza, encogiéndose de hombros.La estaba pasando bomba.Según la nueva fotografía del plano que tomé antes de salir de mi dormitorio, el tercer piso contaba con, al menos, cuatro habitaciones secretas. Los símbolos marcaban diferentes rincones de los pasillos e incluso dentro de otros cuartos, pero con Aldo decidimos tomarlo a la suerte.El primero que encontramos, nada más se trató de un pequeño librero integrado a la pared y cubierto detrás de un feo tapiz. En dicho librero, encontramos una colección de lo que parecían ser solo libros egipcios.—Oh my god —susurré entonces, girándome para ver a Aldonza y mostrarle lo que acababa de encontrar—. Tienes que ver esto.● ● ●


✦ 13 ✦

UWS ● Home ● Investigando el tercer piso

—¿Qué es? —me preguntó Aldonza, con una expresión intrigada, dirigiendo la luz de su celular a lo que le estaba mostrando.—¡Un libro de jeroglíficos! Parece haber sido escrito hace siglos, oh god... ¡No me lo creo!Aldonza me miró como si acabara de soltarle una mala broma.—Ya..., genial —Ella parpadeó—. Libros viejos sobre un tema aún más viejo. Qué emoción.Aunque su comentario no me quitó el entusiasmo, las luces de pronto parpadeando sobre nuestras cabezas sí que me robaron la sonrisa. Aldonza bajó la mirada del extraño comportamiento de la luz para mirarme con cejas arqueadas y una sonrisa entretenida.—De acuerdo —dije lento, entrecerrando los ojos—. Eh..., sigamos.Al llegar al segundo destino, nos sorprendimos. No había nada de secreto en la habitación, pero gracias a su estado, sabía que aún nadie de la familia le había echado un vistazo. La puerta era antigua y lucía pesada, con un estilo de seguro dorado tan complejo que parecía imposible de replicar. Era tan increíble como hermoso, y tan único como malogrado por el tiempo.—Esperemos que esta tenga algo más emocionante que polvo de momias —susurró Aldo con tono emocionado, alcanzando la manilla.Después de unos segundos intentando girar, empujar la madera y soltar maldiciones, Aldonza terminó soltando un quejido derrotado.—¿Necesitas ayuda? —le pregunté.—Sí, dame una mano.Esa era la razón tras no haber sido abierta antes, entonces, estaba bloqueada.—Quizá necesitemos una llave —comencé a pensar en alto, mientras Aldonza seguía forzando la entrada.—Sí, quizá...—Shit, ¿dónde encontraremos una llave? Tardaremos años, si es que en los planos no hay alguna pista. Además, parece ser de las llaves antiguas, ostentosas. Esas tipo victorianas...Aldo dejó de presionar las bisagras oxidadas con su destornillador de cazafantasmas y exhaló, apoyando una palma en la puerta para de pronto lanzarme una mirada.—Tú dímelo, Sherlock —reclamó—. Yo solo vine a buscar fantasmas. ¡Estoy malgastando completamente mi outfit aquí!● ● ●


✦ 14 ✦

UWS ● Home ● Investigando el tercer piso

Aldonza continuaba luchando con la cerradura de la puerta. Su destornillador emitía un sonido metálico al chocar con las bisagras oxidadas, pero la madera seguía firme, negándose a ceder.—Esto es una pérdida de tiempo, Pascu —dijo frustrada—. Deberíamos ir a ver otra de las habitaciones secretas. A este paso, nos vamos a quedar aquí hasta que amanezca y no habremos avanzado nada.Yo asentí, pero mi atención estaba en el diario de Olivia. Tenía la esperanza de que hubiese escrito algo que nos facilitara la búsqueda de lo que fuera que estuviésemos buscando. ¿Quizá una pista de cuál fue su dormitorio? ¿O cuál era su habitación secreta favorita? O mejor, el cómo abrir la puerta sellada del tercer piso que estábamos intentando abrir.Aldonza me distrajo de mi avalancha de pensamientos con un sonido sorprendido.De inmediato, levanté la vista del diario y vi que Aldo estaba agachada, con los dedos metidos bajo la puerta.—¿Qué pasa? —pregunté, acercándome.—Hay algo aquí... como un interruptor —respondió, moviendo los dedos como si estuviera tratando de palpar mejor.Aldonza, entonces, presionó con firmeza. Un suave clic resonó en el silencio, seguido de un sonido mecánico, como si algún tipo de mecanismo se estuviera poniendo en marcha dentro de las paredes. Ambas retrocedimos un par de pasos, escuchando cómo el sonido se intensificaba. Solo incredulidad en nuestros rostros.De repente, la puerta se abrió por cuenta propia, como si no hubiese estado jamás cerrada.Nos quedamos allí, mirándonos mutuamente. Ninguna de las dos dijo una palabra mientras abríamos la puerta para hacernos camino a la oscuridad, cruzando el umbral.—Oye, Pascu, puede que esto no tenga nada que ver con esos fantasmas que buscas-—No busco fantasmas —dije—. Busco más información de Olivia Sinclair y la desaparición de Raym-—Sí, sí, fantasmas. Puede que no tenga nada que ver con ellos —continuó—, pero me sigue sorprendiendo que esto de las habitaciones secretas sea real.La habitación estaba oscura, pero no tanto como para no poder distinguir los contornos de lo que parecía ser un pequeño estudio, con muebles cubiertos de polvo y viejos papeles esparcidos por todas partes.Entonces, sin previo aviso, apenas después de un par de pasos en el interior, escuchamos el fuerte golpe de la puerta cerrándose detrás de nosotras. Y con nuestros gritos de espanto y el último rastro de luz abandonándonos, quedamos encerradas en la habitación.● ● ●


✦ 15 ✦

UWS ● Home ● Encerradas

La oscuridad en la habitación era casi total, solo rota por el débil destello de las linternas de nuestros celulares, que iluminaban las esquinas polvorientas del pequeño estudio. Un silencio espeso nos envolvía, y cada movimiento parecía resonar en las paredes como si también formara parte del escenario de algún teatro olvidado.—De acuerdo. Debe haber algo aquí, ¿no? —pregunté, aunque el leve temblor en mi voz traicionaba la confianza que intentaba proyectar.Aldonza asintió, sus ojos analizando cada rincón mientras, igual que yo, recorría la pared con la mano, buscando alguna pista o interruptor que nos sacara de esta. Finalmente, toqué un botón que parecía una protuberancia en la pared. Al presionarlo, un chasquido seco resonó, y repentinamente, las luces del techo parpadearon, llenando el cuarto de claridad.Ambas entrecerramos los ojos, tratando de acostumbrarnos a la luz inesperada. Cuando volvimos a enfocar, el cuarto reveló todo lo que había estado oculto en la penumbra: recortes de periódico pegados en las paredes, notas manuscritas en papeles amarillentos y viejos planos del teatro que ahora reconocíamos de las fotos del reportaje del periodista, Jonathan Harris. La expresión de Aldonza reflejaba una mezcla de sorpresa e incredulidad.—Damn...Mi mirada seguía las líneas de un papel que describía, en cuidadosos diagramas, cómo funcionaban las trampas de luces y puertas automáticas.—Mira esto —llamé a Aldo para que se acercara a mí, observando con atención el plano de cables ocultos y de interruptores dispuestos para imitar eventos paranormales.—No, tú mira esto.En las paredes que miraba Aldonza, una variedad de registros retrataban la situación con el teatro. A medida que leíamos las anotaciones, los recortes narraban cómo la obra se había cancelado luego de una serie de supuestos avistamientos de fantasmas, de luces parpadeantes y de puertas que se cerraban de golpe sin motivo alguno. No me decidía si se trataban de un estilo de galería de logros o de investigación.Tomando en cuenta el resto de las notas, dibujos y planos en la habitación, me inclino por la primera opción.—Entonces... —Aldonza apoyó la mano en la pared—, nunca hubo fantasmas. ¿Crees que esa tal Olivia y el sujeto que desapareció montaron todo esto?Continué mirando el resto de los mecanismos dibujados en los cuadernos y notas que encontraba. Algunas hojas incluso colgaban del techo.—Eso parece... Tal vez buscaban algo más allá de la obra, algún tipo de impacto...Mis palabras se apagaron cuando descubrí, en una esquina del cuarto, una fotografía enmarcada. Allí estaban ellos, Olivia y Raymond, en blanco y negro, abrazados y riendo, sus rostros apenas separados por un beso.● ● ●


✦ 16 ✦

UWS ● Home ● Encerradas

—Así que Olivia y Raymond eran amantes... —comentó Aldonza.Asentí, limpiando el cristal de la fotografía en la que ambos estaban.—Sí, según lo que leí en su diario, estaba casada con un tipo rico. Debí sospechar algo cuando noté que apenas lo mencionaba.—¿Pero por qué no simplemente se fueron? ¿Por qué todo este teatro?Me encogí de hombros. —¿Dos pájaros de un tiro? —supuse—. Liberarse de las ataduras de un matrimonio no deseado y hacer sus nombres conocidos por el resto de la historia.—Por supuesto. Drama. La droga de los chicos de teatro.—Claro —Me reí—. Vale, ahora intentemos averiguar cómo salir de aquí.Comenzamos a examinar el estudio, recorriendo cada rincón en busca de alguna pista. Aldo quiso intentar forzar la puerta otra vez con sus cosas de cazafantasmas. Fue entonces cuando noté el dibujo de una puerta en las hojas que colgaban del techo. Al tomarla, pude ver que se trataba de un esquema, un dibujo que detallaba el mecanismo de apertura. El mismo interruptor que Aldo había encontrado bajo la puerta para entrar, por dentro se activaba justo en el centro.Ambas bufamos aliviadas después de lograr que se escuchara el clic. Sin perder tiempo, empujamos hasta que la puerta se abrió de par en par, siendo rodeadas por una ráfaga de aire fresco.De vuelta en el pasillo, dimos otro respingo cuando la puerta se cerró por su cuenta tras nosotras.Con Aldonza nos la quedamos mirando unos segundos antes de intercambiar un vistazo entre nosotras.—Entonces —exclamó Aldo—. ¿Tienes hambre?Asentí. —Sí.Sin muchos más rodeos, giré en mis talones y avancé junto con Aldo a las escaleras.—Sigo creyendo que es extraño que se hayan esforzado tanto para desaparecer —murmuró ella, mientras se quitaba parte del disfraz que llevaba puesto—, ¿y si había algo más detrás de tanto drama? Quizá eran criminales, o escapaban de algo... En el cuarto vi una fotografía de los dos en una fiesta aquí, en la sala del primer piso. Super elegante —De pronto alzó las cejas y me miró con los ojos abiertos de par en par—. Oh my god, quizá estaban metidos en un culto.—Sí, sí, las posibilidades son infinitas —le resté importancia—. Sin embargo, lo único que importa ahora, es que pude probar que no hay fantasmas —Me llevé las manos a la cintura y suspiré satisfecha—. Lo demás será para otro día.Y mientras bajábamos las escaleras en busca de algo para comer, las luces del tercer piso parpadearon una vez más.● ● ●

✦ Fin de la primera temporada ✦